Poesía visual y un modoparticular de contar historias a través de la observación de la realidad, son algunas de las particularidades de las fotografías del artista madrileño, Premio Nacional de Fotografía en el año 2000, Chema Madoz.

El pasado 18 de febrero, se inauguró en la Fundación CajaCanarias de Santa Cruz de Tenerife, la ambiciosa y completa retrospectiva “Chema MadozXXI”, con un total de 189 obras en donde se repasa la labor más creativa del fotógrafo a comienzos de este siglo.

Esta exposición acoge en sus dos plantas, pequeñas e inmensas creaciones del artista, todas ellas en blanco y negro ceniza, caracterizadas de un exquisito minimalismo y elegancia. La retrospectiva muestra, en su planta baja, obras de Madoz desde que ganó el reconocido premio hasta el año 2005, y en la alta, sus obras más actuales. El tiempo es un factor imprescindible para recorrer la muestra y establecer relaciones entre los objetos fotografiados, ya que se aprecia en ella un modo especial de contar historias, donde interviene más la sensibilidad que un razonamiento lógico. Las obras están dispuestas en un mismo plano, dándose así sensación de unidad. A pesar de la atmósfera de silencio que predomina, las obras no dejan de hablarnos continuamente. El corpus creativo de Madoz es producto de la observación consciente de la realidad, hace que los objetos contemplados se vuelvan inmortales, que tengan una imprevisible relación, donde la imaginación no tiene límites (una nube en una jaula, una maleta con cuatro patas, una tijera presa por imperdibles), una obra cargada de poesía visual, de simbolismo y que constituye un festejo de creatividad.

La muestra estará en la capital hasta el 28 de Mayo, momento en el que viajará a la sede de la entidaden la capital de La Palma. Es sin duda una visita obligada para todo amante del arte, y en especial de la fotografía.

Yaiza González Suárez

Estudiante en Historia del Arte