La sede de la Real Academia Canaria de Bellas Artes de San Miguel Arcángel, acogió el pasado lunes 15 de abril el acto de ingreso cómo Académico Numerario del pintor lanzaroteño Ildefonso Aguilar de la Rúa. En este acto , presidido por nuestra Presidenta Rosario Álvarez Martínez, estuvieron presentes el Presidente del Cabildo de Lanzarote, Pedro San Ginés Gutiérrez, la Consejera del Área de Cultura del referido Cabildo, Emma Esther Cabrera Toribio, el Senador por Lanzarote, Óscar Luzardo Fuentes, el Secretario Primero de la Mesa del Parlamento, en sustitución del Presidente de esta Institución, José Miguel González Hernández, el Director General de Patrimonio del Gobierno de Canarias, Aurelio González, el Director General de Cultura del Cabildo de Tenerife, Cristóbal de la Rosa Croissier, el Director de Cultura del Gobierno de Canarias, Xerach Gutiérrez Ortega, además de numerosas personalidades del mundo de la cultura. Tras las palabras iniciales de la Presidenta, el Secretario General Gerardo Fuentes Pérez, leyó el acuerdo del pasado mes de junio, en el que se acordó nombrar electo para Académico a D. Ildefonso Aguilar de la Rúa.

A continuación, Fernando Castro Borrego inició una reflexión sobre la singularidad de la obra de Aguilar de la Rúa, enfatizando que la gran aportación del nuevo Académico radica en su visión estereoscópica del paisaje y en su pluralidad disciplinar, que le permite establecer una relación entre las artes que se sustenta en la relación de los sentidos. Afirmó Castro Borrego que su obra es singular, a pesar de que la tradición pictórica vinculada a los paisajes volcánicos ha sido muy rica en Canarias, por lo que es muy difícil la originalidad desde este ámbito, sobre todo si se hace desde la isla de Lanzarote, donde la sombra de César Manrique es muy alargada. Para Fernando Castro, este proyecto creativo que se inscribe en una tradición en nuestras islas, y en la que nuestro recipiendario tiene una gran originalidad a través de su visión estereoscópica, posee una cualidad muy presente: la sensación táctil en la obra de Aguilar de la Rúa, poseedora de referencias emocionales intensas en este artista que tiene sus pilares en Óscar Domínguez, Martín González, Felo Monzón y César Manrique.

Una vez finalizada la laudatio, se procedió a la imposición de la Medalla y Entrega de Diploma por la Presidenta al sonido del Pasaclaustro breve de la RACBA. A continuación, intervino el nuevo Académico de Número, Ildefonso Aguilar, para hablar de sus inquietudes artísticas en un discurso que llevó por título “Paisajes sonoros”. En este manifestó que “la permanente convivencia con Lanzarote constituye un estímulo constante para mis sentidos. Los perfiles de las montañas, los horizontes infinitos, la austeridad y belleza de la arena” han sido motivos inspiradores. Resultó muy revelador que su necesidad de ahondar aún más en el paisaje, le ha demostrado que su silencio está lleno de sonidos, que no le es suficiente la vista para lo que intenta compartir, de ahí su gran vínculo con la música. Ildefonso expuso que siempre hay una máxima en su obra: la inquietud ante la pregunta “¿Qué dimensión tiene y que misterio esconde el paisaje?”. Puede que hallar la respuesta sea un objetivo imposible, tal vez, opina Ildefonso, hay que dejar que todo fluya, con respecto a lo que subjetivamente cada uno pueda sentir.

Antes de concluir el acto, intervino el Presidente del Cabildo de Lanzarote, Pedro San Ginés, manifestando su gran satisfacción como ciudadano de Lanzarote por Aguilar de la Rúa, y trasladando, como Presidente del Cabildo, el orgullo de toda una isla por este artista, pues ha formado parte activa, no sólo en el quehacer artístico sino en el desarrollo cultural. El Senador por Lanzarote Óscar Luzardo, felicitó al recipiendario, e hizo una pequeña reflexión sobre los momentos difíciles por lo que está pasando la cultura en estos momentos.

Rosario Álvarez en su disertación final, acercó nuestra Corporación al numeroso público asistente, la mayoría de Lanzarote. A continuación dio paso al compositor Samuel Aguilar Pereyra , que estrenaba la evocadora obra para piano y electrónica “Estructuras efímeras”.