Antiguos académicos
Antiguos académicos
Lugar de nacimiento: La Orotava, Tenerife.
Fecha de nacimiento: 16 de junio de 1798.
Lugar de defunción: Madrid.
Fecha de defunción: 30 de agosto de 1868.
28 de diciembre de 1850.
Hermano del que llegaría a ser presidente de la RACBA José Joaquín de Monteverde, sus padres fueron don Antonio Monteverde y Rivas y doña Catalina de Bethencourt y Molina. Hizo sus primeros estudios en Cádiz y La Habana, regresando a Tenerife en 1816 para entrar a servir en el regimiento de milicias de La Laguna. Marchó luego a la Península e ingresó en la Escuela de Ingenieros Militares de Alcalá de Henares. En 1820 obtuvo el nombramiento de subteniente de dicho cuerpo. Intervino en diversas acciones militares y cae prisionero en la batalla de Jodar de 1820, permaneciendo en Francia hasta 1824. Regresó entonces a España y tomo parte activa en la guerra carlista, distinguiéndose especialmente en el sitio de Bilbao. En 1837 fue nombrado teniente coronel del Estado Mayor.
Mariscal de Campo de los Reales Ejércitos desde 20 de diciembre de 1851, Director General de Sanidad Militar y de la Escuela de Estado Mayor, Presidente de la Carta Geográfica de España, Caballero Gran Cruz de la Real y Distinguida Orden de Carlos III, de la americana de Isabel la Católica y de la Militar de San Hermenegildo; Comendador de la Orden Imperial de la Legión de Honor en Francia, condecorado con dos Cruces de San Fernando, Gentilhombre de Cámara de Su Majestad con ejercicio, Académico de la de Ciencias Morales y Políticas, a cuyo ingreso leyó su importante trabajo sobre el Inmenso desarrollo de las Matemáticas a contar del siglo XVII; dos veces Diputado a Cortes, a quien le fue ofrecida la Cartera de Marina en 1853, y más tarde la de Fomento, ninguna de las cuales quiso aceptar; Presidente de la Comisión encargada de rectificar los límites o fronteras entre España y Francia (1856-1868), etc. En atención a sus relevantes servicios y especialmente por el feliz arreglo de límites entre ambas naciones, el Gobierno le invitó a titular su Casa, como lo hizo su compañero de Comisión Marqués de la Frontera, distinción a que se negó Monteverde, replicando que su mayor título era su nombre de familia.
“Aparte de sus distinguidos servicios militares tanto más valiosos los prestó si cabe en otros terrenos a que fue llevado por sus variadas aptitudes, donde demostró sus profundos conocimientos científicos y sus dotes de hábil diplomático; siendo Director de la Academia explicaba algunas veces dos o tres clases a la vez; modesto, laborioso, infatigable, su palabra concisa, clara y elegante hacía comprender con gran facilidad las más arduas cuestiones físico-matemáticas; puede decirse que fue el creador del Depósito de la Guerra y a él se debe la reputación que desde antiguo goza dicho centro; organizó los trabajos de la Comisión de la Carta de modo tan admirable, que llamó la atención de los sabios de Europa y durante su misión diplomática se apuntaron y firmaron varios tratados con la nación vecina sobre cuestiones de límites; por tan señaladas dotes y servicios no es de extrañar que a1 dejar el mundo de los vivos sus contemporáneos pensaran y dijeran lo difícil que sería llenar el hueco que dejaba en las Academias, en la Diplomacia y en el Estado Mayor del Ejército”
Reseña de los servicios prestados por el Mariscal de Campo Don Manuel Monteverde y Béthencourt, antiguo Oficial de Ingenieros, impresa en Guadalajara, a 9 de enero de 1914, a expensa de la Academia de Ingenieros.
José PERAZA DE AYALA Y RODRIGO-VALLABRIGA. “Historia de las casas de Machado y Monteverde en las islas Canarias”, Madrid: Espasa-Calpe, 1930, p. 238-241.
Agustín MILLARES CARLÓ y Manuel HERNÁNDEZ SUÁREZ: “Bibliografía de escritores canarios (siglos XVI, XVII y XVIII)”. Tomo V. Gran Canaria, Cabildo Insular, 1987, p. 233.